viernes, 6 de junio de 2008

LA VIOLENCIA


LA VIOLENCIA

a los colombianos nos identifica algo que nos destruye: la violencia. Como heredera del siglo XIX, la violencia expresada hasta por las mujeres y los niños, y manifestada por grandes pasiones y sangrientos sucesos, se constituyó en "una especie de fatalismo colectivo que lleva a considerar los comportamientos violentos como una característica de nuestro hombre"

Castigos, venganzas, saqueos, odios de familia, ejercían una acción estimulante por parte de los partidos políticos, despertando así una emoción casi mística que arrastrara electores hacia las urnas.

En 1944, luego del intento de golpe militar contra López Pumarejo, se dió la revitalización de la tradición de sectarismo político y se hará mucho más evidente con la muerte de Gaitán. Como normas de conducta que vinieron a legitimar de alguna forma los abusos y los comportamientos delictivos, operaron en el período de la violencia bipartidista: la impunidad, la intimidación, el partidismo de la policía, la fragmentación del poder y la ausencia de las más elementales garantías.

El deterioro a través de nuestra historia, de las normas de convivencia, se evidencia en los comportamientos agresivos que han caracterizado a los colombianos, la utilización de la coerción y la fuerza para resolver los conflictos en la vida cotidiana. Las reglas, al no haber sido interiorizadas, son comúnmente violadas.

por eso devemos mejorar prosperar porque con la violencia que hoy en dia se vive no podremos llegar al final.

blogspot

APROXIMACIONES AL CASO COLOMBIANO

APROXIMACIONES AL CASO COLOMBIANO

Dentro de los rasgos más característicos de la cultura política en Colombia, podemos referenciar los siguientes:

EL BIPARTIDISMO COMO TRADICIÓN POLÍTICA

La existencia de los dos partidos tradicionales forma parte de la tradición política colombiana, la cual se reproduce y modifica bajo ciertas condiciones o parámetros, independientemente de la coherencia de sus argumentos. Existe un amplio consenso sobre la característica particular de la historia colombiana de la existencia por más de un siglo de argumentos partidistas tanto liberales como conservadores que guiarían propósitos, actitudes, motivaciones, instituciones y hábitos políticos de los colombianos.

Los partidos políticos al menos hasta el Frente Nacional mantuvieron unas características heredadas de la estructura liberal conservadora del siglo XIX : partidos de notables, básicamente electorales, donde no operaba un trabajo permanente de formación político ideológica de sus miembros. No obstante, a través del arraigo bipartidista, la elite liberal y conservadora mostró experiencia y astucia política lo que le permitió enfrentar las diferentes crisis a lo largo de su historia y lograr mantener ciertos niveles de legitimidad. Desde los años 60 y a raíz de los procesos de modernización y secularización, desciende el sectarismo partidista.

politica colombina


CULTURA POLÍTICA: CONCEPTUALIZACIÓN

Utilizamos la noción de cultura política cuando pretendemos estudiar los modelos o matrices culturales que están implícitas en nuestra concepción de la política, al considerar que ésta siempre está mediada por referentes o filtros culturales. El acento no sólo se hace en la diversidad de la de las instituciones políticas, sino también en las creencias, en los ideales, en las normas y en las tradiciones que colorean de manera particular y dan significado a la vida política en ciertos contextos; se ha ido difundiendo el uso de la expresión cultura política para designar el conjunto de actitudes, normas y creencias, compartidas más o menos ampliamente por los miembros de una determinada unidad social y que tienen como objeto fenómenos políticos

Forman parte de la cultura política de una sociedad las orientaciones actitudinales más o menos difundidas, como por ejemplo, la indiferencia, el cinismo, la rigidez, el dogmatismo o por el contrario, el sentido de confianza, la adhesión, la tolerancia hacia las fuerzas públicas, también forman parte de aquella, las normas – el derecho y el deber de los ciudadanos de participar en la vida política, la obligación de aceptar las decisiones de la mayoría, la exclusión o no del recurso a formas violentas de acción -. Por último tenemos el lenguaje y los símbolos específicamente políticos, como las banderas, las consignas y las contraseñas de las distintas fuerzas políticas.

La cultura política no es algo homogéneo. Se puede considerar que la cultura política en una cierta sociedad está constituida normalmente por un conjunto de subculturas, es decir, de actitudes, normas y valores diversos que frecuentemente se oponen entre sí. Entendemos que los valores políticos pueden verse condicionados por la historia, la estructura social y la experiencia directa de la gente con el funcionamiento del sistema político. Umberto Cerroni considera que el conocimiento social puede construirse científicamente con relación a la política sólo si la asume como concreción histórica – institución - de una relación natural-social que se conecte a los modos de la reproducción material y al proyecto cultural - cultura política - que el individuo obtiene de ello como miembro de una especie histórica.